Modelos de negocio en la web 3.0: aspectos legales

Los modelos de negocio dentro de la Web 3.0

¿Conoces todas las posibilidades de modelos de negocio dentro de la Web 3.0? La Web 3.0, es lo que se conoce como la nueva versión de Internet. Un nuevo concepto que viene a revolucionar y a cambiar los modelos de negocio tradicionales, transformando las formas de interacción y de creación de valor de las personas. Y, además, incidiendo en la percepción de conceptos, tales como la propiedad y la privacidad de los datos.

Aproximación al concepto Web 3.0

En los últimos años la tecnología ha ido evolucionando, así también lo que entendemos por Internet, dando lugar a tres fases: la web 1, la web 2 y la web 3.

La web 1, es lo denominado como “el principio de Internet”, nació en 1989, siendo la era de los blogs, donde los usuarios solamente podían leer páginas web estáticas (textos e imágenes), y siendo exclusivamente consumidores de contenido. No era posible una interacción con la red.

Posteriormente aparece la web 2, comenzando en 2005, y siendo relevante por la aparición de los gigantes tecnológicos, como son Facebook, Google o Amazon. En esta fase, caracterizada por la interacción, lo usuarios empezaron a crear sus propios contenidos y a compartirlos con los demás usuarios de una red centralizada y administrada por las empresas tecnológicos.

Actualmente, nos encontramos en un periodo de transición a un Internet descentralizado, con la aparición de la web 3.0, que por medio de la tecnología blockchain resuelve problemas de la web 2 y permite una nueva forma de interacción entre los usuarios.

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Web 3.0 y Blockchain

A través blockchain, es posible crear redes descentralizadas, donde la información no depende de los grandes operadores, sino de los usuarios. Por ello, en la web 3 los usuarios dejan de ser solo consumidores de contenido, y pasan a ser también propietarios de sus datos e información.

A pesar de que actualmente no exista una definición oficial de este concepto web 3.0, lo cierto es que, este nuevo fenómeno viene a ofrecer una experiencia más rápida y personalizada al usuario, y una mayor capacidad de control respecto a sus datos y a sus activos digitales. Todo ello mediante el uso de la inteligencia artificial, las DApps (aplicaciones descentralizadas), DAO (organización autónoma descentralizada) y la tecnología blockchain.

Además, el uso de la web 3 también implica el cambio a una forma de pago descentralizada, con el uso de las criptomonedas, ofreciendo a los usuarios incentivos financieros en forma de tokens para poder participar o contribuir en proyectos.

Aspectos jurídicos

Como en cualquier otra innovación tecnológica, surgen dudas acerca de su regulación jurídica, o sobre la necesidad de cambio de la legislación actual. Si bien, esta nueva realidad, por el momento deberá desarrollarse respetando la normativa existente, con ciertas adaptaciones.

Y teniendo en cuenta lo servicios que están surgiendo, algunos de los aspectos que debemos tener en cuenta son los siguientes:

Privacidad y Protección de datos. Al tratarse de una web donde su principal activo son los datos, es necesario analizar cada caso concreto para determinar, roles en la web, medidas de seguridad a implementar y responsabilidades entre los participantes.
Propiedad Intelectual. Debido a la posibilidad de tokenizar activos digitales (NFT), y la posibilidad de realizar compras y ventas de estos, será importante definir los derechos propiedad intelectual, y las cuestiones relativas a las marcas o diseños industriales.
Aspectos fiscales. La Dirección General de Tributos ya se ha pronunciado sobre diversas cuestiones que debemos tener en cuenta a la hora de realizar diversas operaciones con criptomonedas y NFTs.
Derecho a la competencia. Establecer determinadas políticas o procedimientos para garantizar mercados digitales adecuados, y prevenir comportamientos de monopolio.
Inteligencia Artificial. Tener en cuenta la propuesta de Reglamento sobre IA de la UE, para el cumplimiento de obligaciones y estándares internacionales.
Blanqueo de capitales. Tener en cuenta las bases que establece la propuesta MiCA y las obligaciones relacionadas con la publicidad y blanqueo de capitales.

En definitiva, la Web 3.0 trae consigo un gran cambio en los sitios webs y en la interacción de las personas. Permitiendo el desarrollo de un entorno descentralizado que permite construir modelos de negocios más sólidos e innovadores.

Dada la complejidad que presenta esta transformación, en DiG Abogados ofrecemos un acompañamiento y asesoramiento legal para resolver las dudas que actualmente plantea esta nueva revolución de Internet, conocida como web 3.0.

Sobre el autor:

Andrea Peláez