Las multas de Hacienda por no declarar ingresos
¿Conoces las multas de Hacienda por no declarar ingresos? En DiG Abogados, especialistas en derecho fiscal e inspecciones de Hacienda, te ofrecemos una visión clara sobre las consecuencias de no declarar ingresos a Hacienda. Este artículo detalla las sanciones, procesos de reclamación y prescripción de las infracciones establecidas por la Ley General Tributaria. Si enfrentas una inspección o buscas asesoramiento preventivo, estamos aquí para ayudarte a cumplir con la ley y minimizar tu carga tributaria.
Multas y sanciones de Hacienda por no declarar los ingresos
La sanción por no declarar la totalidad o parte de la deuda tributaria dentro del plazo establecido para cada tributo se encuentra regulada en el artículo 191 de la Ley General Tributaria y varía según el tipo de infracción cometida.
De acuerdo con este artículo, constituye una infracción tributaria no ingresar, total o parcialmente, la deuda tributaria que debería resultar de la correcta autoliquidación del tributo, salvo excepciones establecidas por la ley. También se considera infracción tributaria no ingresar, total o parcialmente, la deuda tributaria de los socios, herederos, comuneros o partícipes, derivada de cantidades no atribuidas o atribuidas incorrectamente por las entidades en atribución de rentas.
- Cuando la infracción se califica como leve, la multa asciende al 50% de la cantidad que se debía declarar. Se considera infracción leve cuando la cantidad no declarada no supera los 3.000 euros o, siendo superior, no exista ocultación.
- En caso de que la infracción se considere grave, la multa varía entre el 50% y el 100% de la cantidad que se debía declarar. La infracción se considera grave cuando la cantidad no declarada supera los 3.000 euros, sin un límite establecido, y se haya incurrido en ocultación. En este caso, la multa puede ser considerable.
- Si, además, se demuestra que se utilizaron medios fraudulentos para no declarar los ingresos, la infracción se considera muy grave. La multa en este caso oscila entre el 100% y el 150% de la cantidad que se debía ingresar.
¿Cómo determina Hacienda las multas por no declarar un ingreso?
Las multas de Hacienda por no declarar un ingreso se ajustan según criterios específicos, aplicables en la medida en que corresponda:
- Comisión repetida de infracciones tributarias: Si el infractor ha cometido infracciones anteriormente, la sanción mínima aumentará de la siguiente manera:
- Incremento de 5 puntos porcentuales si previamente fue sancionado por una infracción leve.
- Incremento de 15 puntos porcentuales si fue por una infracción grave.
- Incremento de 25 puntos porcentuales si fue por una infracción muy grave.
- Perjuicio económico para la Hacienda Pública: Este se calcula según el porcentaje de la base de la sanción respecto al total que debería haberse declarado.Según el grado de perjuicio, la sanción mínima aumentará así:
- 10 puntos porcentuales si el perjuicio es mayor al 10% y hasta el 25%.
- 15 puntos porcentuales si es más del 25% y hasta el 50%.
- 20 puntos porcentuales si es más del 50% y hasta el 75%.
- 25 puntos porcentuales si el perjuicio supera el 75%.
¿Cuándo prescriben los ingresos no declarados a Hacienda?
Todas las infracciones consistentes en dejar de ingresar, ya sean leves, graves o muy graves, prescriben a los cuatro años desde la comisión de la infracción (dejar de ingresar).
En este sentido, es importante tener en cuenta que Hacienda solo puede reclamar las cantidades no declaradas de los últimos 4 años. La realización de cualquier actuación por parte de hacienda que comporte la interrupción de la prescripción de una declaración automáticamente comporta la interrupción de la prescripción de la posible sanción, ya que la misma deriva directamente de dicha declaración.
En resumen, si Hacienda detecta las irregularidades antes de que transcurran los 4 años, estarás obligado a regularizar la situación y enfrentarte a las sanciones correspondientes.
¿Es posible reclamar una multa de Hacienda por no declarar los ingresos?
En general, es posible impugnar todas las multas recibidas mediante dos opciones principales: el recurso de reposición o la reclamación administrativa. El recurso de reposición debe presentarse directamente ante la Agencia Tributaria, en concreto ante el mismo órgano que dictó la resolución impugnada, por lo que las probabilidades de éxito no acostumbran a ser excesivas, dado resuelven los mismos que han emitido la sanción.
Como alternativa, puedes optar por una reclamación administrativa, que debe ser presentada ante el Tribunal Económico-Administrativo, formado por inspectores de hacienda y que forma parte de la Administración tributaria del Estado. Este proceso ofrece una vía de apelación más neutral, aunque no se deje de estar dentro del ámbito de hacienda.
Preguntas frecuentes
¿Qué factores puede considerar Hacienda para reducir la sanción por no declarar ingresos?
La principal discusión en los expedientes sancionadores consisten en la calificación de la sanción (leve, grave o muy grave) y en la existencia, o no, de medios fraudulentos.
Otros aspectos a tener en cuenta en un expediente sancionador son: el perjuicio económico real, causado a la Administración, la existencia o no de una duda razonable en la interpretación de la norma realizada por el contribuyente. Este aspecto está relacionado con el elemento subjetivo de la culpabilidad.
¿Cómo afecta la regularización voluntaria a las multas impuestas por Hacienda?
Si un contribuyente regulariza su situación fiscal voluntariamente, antes de que Hacienda inicie cualquier acción de verificación o inspección, se evitará la imposición de una multa. En este caso entrarán en juego los recargos por ingresar fuera de plazo sin que exista requerimiento previo de la Administración.
¿Existen diferencias en las multas por no declarar ingresos entre autónomos y sociedades?
No, ya que la infracción tipificada es la misma: dejar de ingresar.
Conclusión
Las sanciones tributarias pueden generar preocupación, pero es importante saber que existen opciones para impugnarlas o reducirlas. La colaboración con la Agencia Tributaria y el cumplimiento puntual de las obligaciones fiscales pueden marcar la diferencia. Sin embargo, en situaciones de duda o dificultad, contar con el asesoramiento de profesionales en materia fiscal, como DiG Abogados, puede ser la mejor opción para evitar complicaciones innecesarias y resolver los problemas de manera eficiente.